
Dice Eckhart Tolle que no venimos a la vida a ser felices sino a “to be challenged”, es decir, a ser desafiados, a vivir retos.
Y depende de cómo afrontemos esos retos percibimos la vida de una manera u otra, teniendo en cuenta que de una manera u otra aquí significa de miles de maneras diferentes, con miles de matices diferentes.
Y, así, en cada desafío tenemos la oportunidad de aprender, de mirarnos, de descubrirnos, de despertar, de aumentar la conciencia…Y también la posibilidad de sufrir porque no aceptamos el desafío o porque no lo entendemos como tal sino como un castigo divino o porque no le encontramos sentido…
Y en cada reto tenemos la oportunidad de experimentarnos como seres humanos en todas sus vertientes, sin que ninguna de ellas sea mejor o peor desde esta perspectiva. Todo es humano. Todo es experimentable. Vamos caminando. Lo cual no quiere decir que tengamos que sufrir o ser infelices necesariamente. Aunque el dolor es tan humano como la alegría.
Y, sin embargo, cada aprendizaje, cada toma de conciencia va en la dirección de ver y tomarse todo con un prisma cada vez más amplío, más profundo, más sabio…
Esto sirve para nosotr@s y para nuestr@s hij@s. Ayudarles a tener conciencia de todo esto les puede servir infinito. Y a nosotr@s nos puede valer para verlos crecer con otra mirada, sin sentir la sensación de que tienen que triunfar o ser felices.
Solo, y no es poco, que sean conscientes de dónde estamos y qué hacemos por esta tierra.
2 min